miércoles, 28 de diciembre de 2011

UN ALMACEN DE BARRIO

En esta nuestra ciudad de Vicente López,  moderna, dinámica,  donde hay  grandes tiendas, hipermercados y shopping, encontrar una pequeña y antigua despensa o almacén,  es casi un milagro.  En mi barrio, Florida,  existe. Se llama: “Betty” Despensa.


La característica de esta Despensa es que subsiste a pesar de que convive con un supermercado chino a menos de 1 cuadra,  y de estar ubicada a tan solo 250 metros de la importante Avenida Maipú, donde sobran negocios modernos de cualquier tipo. ¿Cuál es el misterio?


Betty y su marido atienden este almacén desde hace muchos años. Pero tienen un secreto. En realidad son varios…


El primero es que está siempre abierto. Sábados por la tarde, domingos, feriados… Tienen todo aquello que Usted diga:
  ¡¡Uyy!! Me olvidé  de comprar…
Ellos lo tienen. Pero además poseen una hermosa cualidad: Atienden con una sonrisa, una broma, un chiste (eso no se compra en ningún lado). Poseen “Buen Humor”.

Venden diarios, revistas, carbón, cigarrillos, bebidas frescas, golosinas, pan fresco todos los días y los domingos…  Facturas!!. Y muchas cosas más.


Pero desde hace unos meses, la estrella de la Despensa Betty es: “El Sándwich de Milanesa”
Es que en los alrededores del barrio hay grandes movimientos de construcción: edificios nuevos y reciclados de casas viejas. Por eso hay muchos obreros que necesitan comer al mediodía.
Betty comenzó haciendo unos sándwiches de milanesa con pan fresco, para los trabajadores.
Al principio eran unos pocos, luego la demanda fue en aumento y actualmente no son solo  obreros los que van a comprar. Les aseguro, porque los he probado, que esos sándwiches están buenísimos!  A más de uno/a nos sacan de  apuro, o bien para tentarse con algo rico.


A esta altura, la gente de  “Betty  Despensa” prepara sándwiches  de milanesa de ternera y milanesa de pollo. Ambos llevan lechuga y tomate. Y si   desean “Especiales”,  van con el agregado de  jamón y queso. Pueden ser fríos o calientes.


¡Venden una buena  cantidad  por día!

martes, 27 de diciembre de 2011

Y que tal unos chorizos en el disco de arado?

CHORIZOS A LA PUMAROLA EN DISCO DE ARADO

Para esta comida es conveniente usar chorizos blancos de buena calidad. Cuando vaya a comprarlos ya sea en el supermercado o a su carnicero,  debe tener en cuenta que hay mucha variedad en chorizos. Están los de cerdo puro, los de mitad carne de vaca y mitad de cerdo, los muy grasosos, los aromatizados y saborizados (al orégano, a la provenzal, etc.)


Yo compré los que llevan  50% de carne vacuna y 50% carne de cerdo. Además elegí que no sean los más baratos, pues esos vienen con mucha grasa. Les comento que para acompañarlos hice unas riquísimas croquetas de arroz, pero quedan muy bien con papas hervidas cubiertas por la salsita o simplemente en un pan como sandwich.


Ingredientes para 30 chorizos

30 chorizos de buena calidad
½ kg de ají morrón verde
½ kg de ají morrón rojo
1 kg de cebollas blancas
 ¼ kg de cebollas de verdeo
3 puerros
3 ó 4 zanahorias
1 kg de tomates perita bien rojos
1 litro de vino blanco
Sal,  ají molido,  orégano, laurel a gusto
Aceite cantidad necesaria
Leña cantidad necesaria y carbón

Preparación previa
Pinchar cada chorizo de un lado y del otro con un tenedor. Colocarlos en una olla de agua hirviendo. Dejar hervir unos 5 minutos, para que larguen bien la grasa (yo los hago así por que es menos pesado a la digestión, hay gente que prefiere ponerlos en la salsa sin desgrasar) Igualmente siempre conviene pincharlos antes,  para que no se revienten.
Tirar el agua con la grasa y reservar los chorizos.


Mientras,  cortar todas las verduras en juliana, menos los tomates. Las zanahorias  se pueden cortar en bastoncitos.
En otra cacerola con agua hirviendo,  sumergir unos instantes los tomates para que el calor les levante la piel. Una vez fríos quitarles la piel y picarlos.



Solicitarle a un caballero de la familia o amigo,  que prepare un hermoso fuego con leña e ir calentando el disco de arado. Cuando esté a punto echarle un buen chorro de aceite y comenzar a agregar las verduras.




 Rehogar. Ir mezclando hasta finalizar con todas. Agregar los tomates, el vino y tapar el disco. Dejar cocinar unos minutos. 


 Levantar la tapa,  agregar todos los condimentos y los chorizos. Volver a tapar y dejar cocinar hasta que se reduzca la salsa.


No olvidar de ir regulando el fuego. Una vez que la leña encendió bien,  es cuestión de mantener el fuego constante. También se puede agregar unos carbones.
Resultado final: Riquísimo y entretenido!!!

domingo, 25 de diciembre de 2011

El Vitel Tone de Victor

Esta receta la envía Victor. El y su esposa Marta,  viven en la Hermosa ciudad de Mar del Plata.
 

Victor, sabe cocinar muy bien y es un experto en pizzas. Esta receta es un clásico argentino que se cocina mucho para las fiestas de Nochebuena y Fin de año.
Muchas Gracias Victor!!!

                                                                                  VITEL TONÉ

Esta es una receta que implementé en la época que tenía la Rotisería, hay muchas variantes en lo referente a la salsa, cada uno puede modificarla a su gusto.


Comenzamos con sacarle la pielcita y los restos de grasa a un peceto de aproximadamente 1 ½ kg.


Luego, como tengo una olla a presión (Marmicoc) le coloco en el fondo un poco de aceite y sello el peceto, luego le agrego: agua hasta cubrir el peceto, laurel, ajo cortado, romero, salvia, perejil, alguna cebollita de verdeo, todo esto para darle sabor a la carne. El tiempo para la cocción depende del peso, aproximadamente 1 hora por kg.


Terminada la cocción, dejamos enfriar y luego separamos el caldo del peceto, y lo ponemos en la heladera para mantener hasta el momento de cortar en finas rodajas.

SALSA
Ingredientes (Para un peceto de 1 ½ kg).

Crema de leche ½  lt.
Atún desmenuzado aprox. 360 gr.
Anchoas  6
Mayonesa 1 taza aprox.
Vino Blanco cantidad necesaria (1/2 vaso)
Alcaparras o pepinillos en vinagre.

Preparación 
Se coloca en una procesadora primeramente: el atún, las anchoas y se procesa. Luego se  va agregando la crema de leche y la mayonesa, por último  se  agrega el vino.
La salsa tiene que tener consistencia, si queda muy chirla se le agrega más atún o en su defecto,  yema de huevo duro.
Es conveniente que la salsa se prepare unas horas antes para que tome sabor. Mantenerla siempre en frío, hasta el momento de servir.


Un saludo
Victor

jueves, 22 de diciembre de 2011

Hoppelpoppel

No se porqué hace unos días, me vino a la memoria una comida que hacía mi Oma (abuela), hace muchísimos años.
Le pregunté a mi hermano si la recordaba y enseguida me envió la receta. Me resultaba graciosa por el nombre:
Hoppelpoppel. Yo no sabía una palabra de alemán, pero esas me sonaban simpáticas. Pero me dice mi hermano,  que vivió muchos años en Alemania,  que "las denominaciones populares no están  en el diccionario alemán. Se trata de una tortilla de sobras o restos"
La base de esta comida era hacerla con restos. Fundamentalmente papas hervidas sobrantes,   más algún  resto de carne. (podía ser de vaca, pollo o salchichas). Mi Oma la cocinaba con salchichas alemanas (en su heladera siempre había salchicha alemanas ahumadas)

Yo las tuve que comprar especialmente para recrear esta vieja receta. 
Ahh… los comentarios son míos,  no de mi hermano.


¡Ojo! Esta comida “No es  dietética, Ni vegetariana, Ni nada  por el estilo”… pero es riquísima para darse un gustito de vez en cuando.

Hoppel Poppel
Ingredientes
600 g de papas cocidas
300g de carne hervida o asada u otros restos de carne. (Ella, la Oma,  solo usaba salchichas ahumadas)
1 cebolla grande picada
4 huevos o más
60 g de manteca o margarina
100 ml de crema de leche
Sal y pimienta en grano, si es posible,  recién molida


 Preparación
Las papas hervidas, sobrantes o hervidas para esto...se cortan en rodajas o cuadrados y se fríen en manteca o margarina  hasta que se pongan doradas.


Se cortan las  salchichas en rodajas y se doran con la cebolla picada en una segunda sartén. A último momento le agregué un poco de verdeo, solo la parte verde cortada muy finita. 


Luego juntar en una de las dos sartenes,  las papas con las salchichas y mezclarlas bien.


En un recipiente, cascar los huevos y batirlos con la crema o leche....echarle sal y pimienta y volcarlo sobre la sartén con las salchichas y las papas.


Tratar todo como si hicieras una tortilla u omelette, pero cuando el huevo comienza a coagular, romper la mezcla,  revolviendo suavemente con una cuchara de madera. Bahh… es un revuelto.


Es una receta para aprovechar restos de comida aunque aconsejo que la hagan con salchichas ahumadas, porque eso le brinda “el toque” a esta receta.


Servimos con ensalada de lechuga y zanahoria rallada

sábado, 17 de diciembre de 2011

Inédito en el mundo


McDonald´s se fundió en Bolivia por desinterés del público y cierra todos sus locales
Todos los esfuerzos desarrollados por la cadena de hamburgueserías McDonald´s para insertarse en el mercado boliviano resultaron infructuosas. De nada valió preparar la salsa llajwa, favorita del altiplano, ni llevar a los mejores conjuntos locales en vivo.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Reserva Costera Sur

Último feriado largo del año!!
Mi hija y un grupo de amigos, decidieron pasar unos días de camping, en la Reserva Costera de Magdalena, Pcia. De Buenos Aires. (140 Km de Bs. As.)



 Iban mis nietos, así que aprovechamos la ocasión y con previo consentimiento de los acampantes, mi marido y yo nos colamos. Pero en lugar de llevar una carpa, alquilamos un simpático “Dormi” de los que ofrece la reserva para quienes desean algo más cómodo que una colchoneta o bolsa de dormir.



El Lugar se llama El Destino”. Es una antigua estancia ubicada a la orilla del Río de la Plata a 17 Km de Punta Indio 

http://www.reservaeldestino.org/home.html
“El Destino” es una fundación cuyo objeto es promover y contribuir a la defensa, protección y desarrollo de las especies de flora y fauna de Argentina, así como fomentar el amor por la naturaleza y su comprensión a través del conocimiento, la difusión, educación y aplicación de estrategias para su protección y desarrollo.



Donde originalmente eran las caballerizas, se construyeron los actuales “Dormis”. Estos son sencillos y cómodos. Hay un gran comedor comunitario, con cocina, heladera y vajilla. Hermosas parrillas. Todo se comparte, tanto con otros turistas, como con investigadores que se encuentran alojados allí,  estudiando la fauna y flora del lugar.



La zona de camping está en medio de un hermoso bosque.

Mi hija y sus amigos prepararon un hermoso costillar a la cruz.


Les llevó 7 horas hacerlo. No faltó la guitarra ni una cantora.


La noche siguiente cocinaron pizzas a la parrilla. Eramos 14 adultos con 2 niños y un bebé. ¿Se imaginan cuantas pizzas hicieron? Yo perdí la cuenta…

Fueron 3 excelentes días con acompañamiento de muy buen clima, lo cual permitió que nos bañáramos en el río.







Por último mi marido y yo queríamos conocer Punta Indio.


Así que manejamos los 17 km de camino de conchilla con bastante serrucho, para visitar los balnearios. 


En todo el pueblo no existe asfalto y no sé si es eso, lo que lo hace tan pintoresco.
http://www.descubrepuntaindio.com.ar/
 Tiene 3 playas muy lindas que se pueden disfrutar todo el día. Es río, pero la gente del lugar dice que según como sople el viento,  a veces el agua es salobre, pues entra algo de mar. Es que ahí comienza la Bahía de San Borombón.

Llegaron los zorzales

Este video lo envía mi amigo Alex. Muchas Gracias!!

viernes, 2 de diciembre de 2011

¿ Cómo se puede cocinar el tiburón?

Aprovechando el último feriado, nos fuimos una escapada de 4 días al mar. Villa Gesell, ciudad a la que hacía varios años que no íbamos.


 La encontramos hermosa! Con esas playas típicas de la llanura pampeana, donde se puede caminar, caminar y caminar… El límite de las caminatas es “lo que el cuerpo aguante”, ya que son muchísimos kilómetros de playas.


La primera mañana salimos a caminar y luego de un buen rato llegamos al muelle.


Encontramos a un pescador al lado de su lancha. Había pescado durante la noche y estaba vendiendo su pesca.


Mucha gente se amontonaba alrededor de una improvisada mesa hecha con  unos listones de madera y dos caballetes. En el centro había un agujero y debajo,  un recipiente,  donde echaba los residuos.


A los costados se encontraban los cajones con los pescados que había extraído del mar. La pesca había sido excelente, me enteré: 16 cajones.


Estos contenían en su mayoría,   tiburones de tamaño regular y otros más pequeños,  llamados “cazones”. También se veían algunas corvinas y uno que otro pescado de aspecto bastante feucho, que me dijeron se llama “Pollo de Mar”.


Ahí mismo lamenté no haber traído encima la cámara fotográfica y a su vez, no poder comprar un pescado para cocinar, por el hecho de habernos  alojado en hotel.

Era impresionante ver al  pescador abrir cada pescado, extraer las visceras, despellejarlo, quitar las aletas y cola. Todo a muchísima velocidad y con gran maestría.



Los  más venddidos eran los tiburones de tamaño mediano. Los cortaba en trozos gruesos, finos o en lomos, según el pedido de cada cliente.

Se me ocurrió preguntar en voz alta:
─ ¿Cómo se puede cocinar el tiburón?


Al instante desde los cuatro costados empezaron a llover recetas.

Un señor me dijo:
─ Es riquísimo al horno con papas y bien cubierto de: ajo,  pregil, cebolla, ají morrón y toda la verdura que le guste.
Pero otra señora lo interrumpió y me dijo:
─ Ahh…pero lo mejor es cocinarlo a la cacerola. Una buena salsa con un chorrito de vino y acompañado de unas papitas hervidas.
Saltó un señor mayor y dijo:
─ No,  no.  Lo mejor es comer el tiburón frito. Se cortan rodajas finas, se condimentan con sal y pimienta, se pasan por harina y a la sartén con abundante aceite. Cocina de un lado y luego del otro. Bien doradito…
─ ¡Pero es frito! ─ reprochó un jóven atlético. En cambio lo puede hacer a la plancha con limón. Es mucho más sano!

Yo estaba desesperada por memorizar todas las recetas en mi mente. No quería perder ninguna.
Me prometí que iba a volver con mi cámara de fotos, por lo cual le pregunté al pescador:
─ ¿Mañana va a estar?
─ Sí ─ dijo. Tengo que aprovechar que hay muchos turistas.

A la mañana siguiente, desayunamos y salimos hacia el muelle. Esta vez con mi cámara de fotos.


El pescador estaba, la lancha y la mesa mostrador, también: Pero había muy poca gente. Nada que ver con el día anterior.
Le pregunté:
─ ¿Qué pasa que casi no hay compradores?
─ Es que la pesca fue muy mala. Solo saqué dos cajones y son tiburoncitos chicos.
─ Pero si ayer había sacado muchísimo…
─ Y si. Pero la pesca es así. Hoy, no saco ni para los gastos.
Igualmente tomé las fotos, pero ya no era lo mismo que el día anterior. ¡Qué Pena!